UN TRUCO PARA SER TÚ MISMO ...
Querido lector, te invito a cerrar los ojos
y recordar un momento de tu vida en el que te sintieses feliz sin haberlo
provocado otra persona, unos instantes en los que la felicidad rebosase de
adentro a afuera ... si no lo recuerdas simplemente imagínatelo, create el
paisaje interior que logre tal efecto. Cuando esta sensación la sientas en todo
tu cuerpo levanta lentamente tus párpados ante un espejo y mira tus ojos ... descubrirás que brillan ... lo
hacen para recordarte que eres un astro con luz propia.
Te
propongo iniciar el día recordando esta sensación, encarnándola ... y desde ella iluminar tu camino con tu
propia luz ... ya no habrá más sombras frente a ti que puedan asustarte, ya tus
miedos dejarán de impedirte ser tú mismo.
Te preguntarás qué cuánto durará este
efecto, no te preocupes por ello, pues repitiendo la operación anterior puedes
volver a cargarte de tu propia esencia, de tu propia luz, tan solo te hará
falta un lugar tranquilo y un espejo, algo tan cotidiano y presente en tantos
sitios como un lavabo puede servirte. En el fondo, sólo las excusas pueden
impedirte ser tú mismo, sentir tu propia felicidad, un simple truco, como has
visto, puede evidenciarlo ... ¡qué gran verdad aquello que dice Mary Poppins: "ser feliz es un truco al fin ..."!
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