RECUPERANDO LA NOCIÓN DE JUEGO: CRECER PARA NO SER MAYOR, SINO GRANDE



       De niños veíamos las dificultades como un juego a disfrutar, como un reto para descubrir hasta dónde podíamos llegar. Buscábamos estrechas pasarelas para gozar de nuestro sentido del equilibrio, abriendo nuestros brazos no sólo para buscar la ayuda del efecto balanza, sino también para sentirlos como las alas que nos recuerdan nuestro propio poder creador. Nos sentíamos mayores no en edad  sino en poder, porque en el fondo sabíamos que teníamos la capacidad de jugar a todo aquello que se nos ocurriera.


       Nuestra educación, nuestro entorno en masa, empezó a atarnos esos brazos-alas, ¡y claro, comenzamos a perder el equilibrio y con él a sentirnos mayores en edad y pequeños en poder! Como broma llamamos a este proceso crecer, madurar, tal vez para así olvidar lo que habíamos perdido.
      Querido lector, ¿te suena todo esto …?, ¿te habías dado cuenta de este proceso menguante …? Mira tus brazos y tus manos y pregúntate por qué dejaron de ser alas, por qué  tu vida está desequilibrada …. en definitiva, cuándo perdiste la noción de juego para empezar a ver la vida como una serie de obligaciones …
      Pero no te entristezcas, que eso aún te hace más “mayor”; no hay motivos para ello, pues el niño que habitaste sigue vivo en ti, encerrado, eso sí, pero  … ¿quién te va a impedir que lo liberes …? Comienza por sentirlo en tu corazón, por ponerlo en todas y cada una de tus células, siente su alegría, sus ganas de jugar … ¡mira … ya empiezas a crecer en poder, tu imaginación se expande …! Ahora puedes volver a contemplar tus brazo y tus manos, elevarlos y recuperar el equilibrio sintiéndote balanza … en vez de las pasarelas de tu niñez  ahora dispones de esos problemas que te obligan a caminar por grandes estrecheces, pero ya no te sientes pequeño ante ellos , sino grande, muy grande … tanto que ya imaginas a tus brazos como alas y a tus manos  como creadoras sin límites … ¡Felicidades has pasado de ser mayor a ser grande!  
  
  





No hay comentarios:

Publicar un comentario